Las técnicas odontológicas avanzan a un ritmo vertiginoso. De hecho, hace apenas unos años, algunos de los procedimientos que se usan hoy en día eran impensables.

Esta innovación constante hace posible se consigan resultados excelentes, tanto en el aspecto funcional como en el estético, y también desde el punto de vista de la comodidad del paciente.

Por eso es imprescindible que los odontólogos se mantengan al día de estas innovaciones técnicas y sean capaces de aplicar las herramientas necesarias para realizar el mejor tratamiento posible.

La formación continua es necesaria no solo para los odontólogos que quieran conocer y poder utilizar los métodos más punteros, sino también para aquellos que decidan dedicarse a la investigación, ya que para acceder a un doctorado es imprescindible haber cursado previamente un máster o un postgrado.

Actualmente hay tres vertientes principales de investigación odontológica: la ortodoncia, la implantología y la estética dental, que incorpora las dos ramas anteriores.

El camino de la investigación odontológica es exigente, pero muy gratificante, pues gracias a la investigación existen procedimientos tan novedosos como los que mencionamos en este artículo.

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Odontología a medida

Gracias al desarrollo tecnológico en el campo de la odontología, es posible realizar tratamientos a medida para cada paciente en función de sus deseos y necesidades.

Estas innovaciones permiten fabricar con gran precisión piezas de alta calidad que se adaptan a la perfección a la dentadura del paciente: no solo hacen que la boca funcione de manera óptima, si no que el resultado estético también es excelente.

Algunos de estos campos de mayor desarrollo son el diseño asistido por ordenador, que aplica la nanotecnología a la producción de piezas dentales; las terapias genéticas, una disciplina con un gran potencial que todavía está en ciernes; y la odontología láser, que reduce en gran medida las molestias del paciente.

Odontología y nanotecnología

La odontología se ha beneficiado mucho del desarrollo de la nanotecnología. Una de las técnicas más novedosas consiste en utilizar materiales dentales con nanopartículas incorporadas.

Estos materiales, como por ejemplo, los adhesivos antimicrobianos compuestos de nanotubos de carbono, ayudan a proteger, reconstruir y sanar los dientes y el esmalte, y se espera que en el futuro sean capaces de evitar enfermedades bucodentales.

Investigación en implantología

La implantología es la disciplina odontológica que más rápido ha avanzado en los últimos años. No hace mucho, implantología era sinónimo de largos y costosos procesos desagradables para el paciente, pero gracias a la investigación en este campo, ahora se pueden realizar implantes de manera rápida y eficaz con ayuda de ordenadores de alta precisión.

Una de las mejoras más importantes que se ha experimentado es la reducción del tiempo de espera entre intervenciones de meses a semanas. Gracias al uso de hormonas del crecimiento, se acelera la regeneración del hueso y su integración con el implante.

En definitiva, el odontólogo se enfrenta a un panorama científico en el que se producen grandes cambios a gran velocidad. Por tanto, la formación continua es un requisito imprescindible para alcanzar la excelencia en la técnica y ofrecer los mejores servicios a los pacientes.

 

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